La CTA Río Negro expresa su apoyo a la lucha por la salud de todas y todos que lleva adelante el personal de los hospitales rionegrinos. Es una lucha por la vida y la comunidad toda debiera apoyarla, porque las condiciones de extrema emergencia en que el desgobierno provincial ha puesto al sistema de salud ya no permiten más dilaciones.
El hospital público es ese lugar al que cualquiera puede llegar trasladado por las personas que nos ayudan cuando no podemos con nosotros mismos, para que nos atiendan y nos preserven la vida y la salud. Es el lugar al que acuden madres y padres preocupados por sus hijos. Es donde vamos a que nos curen cuando estamos enfermos. También es el lugar donde realizarnos controles y prácticas sencillas que nos mantengan saludables y que no generemos un perjuicio para nuestra vida y para los dineros de la comunidad, porque todos sabemos que cuando no hay prevención o la acción curativa se hace tarde, en emergencia, el riesgo de la vida es mayor y el gasto (y el negocio para algunos vivos) también es mayor. Así, cuando es negocio ya no es salud, es enfermedad. Con el hospital en crisis, colapsado porque cada vez hay menos personal y ya ni hablemos de la falta de insumos, pero sí mencionemos que se sigue desviando gran parte del presupuesto de la salud pública, hacia la salud privada, nuestra vida y nuestra salud están en riesgo y tenemos que defendernos.
Defendernos de los que siguen apostando al negocio de la enfermedad, a costa de abandonar cada día más el sistema público, cuya principal misión que es la prevención y la promoción de la salud cada día se hace más utópica, porque el poco personal que va quedando hace rato que no puede cumplir dichas funciones, dedicado como está, y cada vez en peores condiciones de saturación y sobrecarga, a la exclusiva emergencia. Los de arriba quieren que todo termine siendo privado y siempre haya que pagar para tener salud, para comprar salud y si no la podemos comprar, bueno… nos darán una aspirina o algo barato para consuelo y listo.
Por eso hoy una vez más estuvimos acompañando, con toda la comunidad que entiende que no puede desentenderse de este problema, las actividades que se desarrollaron desde las 11 en el hospital de Cipolletti. Luego se desarrolló la asamblea de los trabajadores.
Basta de salarios miserables y condiciones laborales que enferman y ahuyentan a quienes tienen la tarea de preservar nuestra salud.
La dignidad de las trabajadoras y los trabajadores hospitalarios es la única garantía en el acceso al derecho humano a la salud.
Cipolletti, 17 de septiembre de 2009.
Héctor Luis Giannini, Sec. Gral. CTA Río Negro
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