Democratización del IPROSS

Desde la CTA Río Negro, expresamos una vez más nuestro respaldo al proyecto de la legisladora provincial Silvia Horne, proponiendo la elección directa de los representantes de los afiliados en el Consejo de Administración de la obra social provincial IPROSS.
Esta forma es la única democrática, que respeta al conjunto de afiliadas/os, genera transparencia, claridad y sobre todo una representación autónoma de las políticas del gobierno provincial, quien hasta ahora sigue siendo el gran “elector” de los supuestos representantes de los trabajadores.
Quienes se han expresado en contra de este proyecto, que toma una de las propuestas que desde hace muchos años viene haciendo la CTA para el IPROSS, son quienes han integrado en varias oportunidades las representaciones ilegítimas y cómplices de las peores políticas de vaciamiento de la obra social provincial, llevadas adelante por un gobierno que ha vaciado de democracia y representación genuina todas las instituciones públicas de gobierno colegiado que hay en la provincia, como los Consejos de Salud (provincial y locales) o el Consejo Provincial de Educación. Los que se oponen a que haya democracia en el IPROSS, no defienden a los “sindicatos chicos” ni a nadie genuinamente, sino su rol de acompañantes sempiternos de las políticas autoritarias del régimen radical que desde hace 20 años violan la autonomía y sobre todo la autarquía de los sabios organismos fijados en la Constitución provincial.
Desde abril 2008, en una irregular y accidentada primer y única convocatoria del Consejo Asesor del IPROSS, donde ni siquiera se debatió y aprobó un reglamento interno, como indica la ley, fueron consagrados los tres vocales gremiales del Consejo de Administración del IPROSS, en una gestión que jamás volvió a convocar al Consejo Asesor (violando la ley reformada) y que jamás rindió cuentas de nada a nadie. Han llevado adelante una gestión que no ha mejorado ninguno de los históricos problemas de la obra social, pero con el agregado de contar con el aumento de la cuota de los afiliados.
Son los que nunca se oponen a las leyes de “emergencia” que fijan la caja única, los que han avalado la inexistencia de balances claros en la gestión del IPROSS, los que no se preocupan por el destino del aporte de los afiliados y mucho menos de las históricas deudas que el Estado provincial, mantiene con la obra social, que no son otra cosa que salarios indirectos de los trabajadores descontados y nunca destinados al fin legal, es decir utilizados en forma ilegítima.
La elección directa es una apuesta cierta para lograr representaciones autónomas del gobierno y a favor de la gente y nunca es discriminatorio para nadie, salvo para los antidemocráticos o los acostumbrados a ocupar sillones que no merecen, porque nadie los eligió para ello.
Los sindicatos que integramos la CTA y muchos otros sectores afiliados al IPROSS y no representados por el trío que acompaña hoy a Pinazzo, gracias a una ley que lo único que pretendía era aumentar las cuotas, estamos convencidos de que no hay legitimidad en los procesos que hasta el momento se han utilizado para designar a los representantes de los trabajadores rionegrinos en el IPROSS. El aumento de los vocales sólo ha servido para que los que antes se turnaban ahora estén juntos, acompañando las políticas del gobierno que nos generan el IPROSS que tenemos y que tanto nos duele y nos enferma.